Dadá, la revolución del arte







DADÁ
 LA REVOLUCIÓN DEL ARTE


















Francisco Irigoyen
Seminario II
2012



Introducción

El Dadaísmo surge de un estado generalizado de insatisfacción frente al modelo económico, político y social de una Europa recientemente industrializada, con grandes cambios estructurales de la vida moderna y la primer gran guerra que el mundo presenciaría. Artistas de todas las ramas del arte se unen a esta nueva corriente y se forman grupos en un gran numero de ciudades a lo largo de Europa y luego Estados Unidos. Los dadaístas, aunque inventaron nuevas formas de crear “arte”, y utilizaron técnicas y materiales que hasta ese momento nunca se habían asociado al mismo, no se caracterizaron por ninguna propuesta en particular, como ya lo habían hecho las diferentes vanguardias de principio de siglo. Este movimiento no pretendía marcar nuevas directrices sobre como era la mejor manera de que el artista se expresara. Si no que toda su propuesta fue justamente una anti propuesta, sus obras de arte no pretendían serlas.
En este trabajo lo que se pretende es dar un pantallazo general de la actualidad en la que se encontraban los diferentes grupos dadaístas de principio de siglo, así como de sus principales integrantes. Conocer algunas de sus aportes al arte moderno. Para luego hacer una breve reflexión sobre las semejanzas  con la realidad actual del artista y la obra.


Orígenes del Dadaísmo

El movimiento Dadá surge en 1916, creado por Hugo Ball, Tristan Tzara, Hans Arp, Marcel Janco y Richard Huelsenbeck, en el Cabaret Voltaire, un pequeño local donde Hugo Ball y su amiga Emmy Hennings habían organizado un pequeño espectáculo de variedades donde participaron todos.
Surge a partir de la situación política y social mundial, en Zurich, pero rápidamente tuvo lugar en varias ciudades europeas así como en Estados Unidos.
Era un movimiento no solo artístico, sino también literario, musical, filosófico, político, antiparlamentario, pero sobre todo, infantil. Utilizaban la alarma, la sorpresa y el escándalo para atraer y sobresaltar al publico. Este movimiento fue principalmente la expresión de  la actitud con la que la juventud internacional reaccionó ante un gran repudio hacia la sociedad y la política de la época.
La gran aceptación del público y la numerosa concurrencia a las varietés Dadá para entretenerse con las provocaciones planteadas, fue lo que hizo tanto que se expandiera rápidamente dicho movimiento como que perdieran eficacia. La gran popularidad alcanzada en un breve lapso de tiempo, traicionó su razón de ser.
Hugo Ball, en uno de sus manifiestos, expresa que el Dadaísmo ya había llegado a su fin a  los pocos meses de sus inicios.
La principal diferencia del Dadaísmo con otros movimientos artísticos de vanguardia, como el futurismo en Italia, el cubismo en Francia o el expresionismo Alemán, fue el alcance mundial que logró. Zurich, Berlín, Hannover, Colonia, NY y París, entre otros. Y la gran comunicación con la que contaban entre los diferentes grupos de estas ciudades.


Diferencias dentro del propio Dadaísmo

Dentro del Dadaísmo, hubieron diferentes formas de demostrar la disconformidad que tenían sus integrantes de la sociedad y la política .
En Zurich, el recitado era la principal actividad de los Dadaístas. Los Dadá expresaban la nausea provocada por la situación política, rehusando cualquier postura al respecto. Fue una ciudad donde se exiliaron artistas y pensadores de toda Europa.  Ahí gozaban  de una libertad de expresión total, libres para hacer sus exposiciones en el café Voltaire, y así expresar de las maneras más extrovertidas y disparatadas ese malestar generalizado por la nueva sociedad industrializada. Con sus masas proletarias destinadas a monótonas y rutinarias tareas, así como la explosión de la primera guerra mundial.
“No es Dadá el sinsentido; el sinsentido es la existencia de nuestra  época” Los Dadaístas. (1)
En Berlín, expresaban su oposición a la guerra, al gobierno y a la burguesía conservadora con manifiestos, apelaciones y actividades públicas. Mediante varias revistas lograron alcanzar un numeroso publico, con tiradas de varios miles de ejemplares.
Sin embargo, en los comienzos del movimiento en esta ciudad,  Raoul Hausmann, principal personaje del mundo Dadá, fue encarcelado temporalmente. Dos años después, en 1919, el grupo pudo finalmente reagruparse.
“El proletariado estaba como alelado y no despertaba de su somnolencia, por eso hubo que reforzar el activismo Dadá; contra un mundo que ni siquiera reaccionaba con hombría frente a una atrocidad imperdonable” (2)

1.    Dadaísmo. Taschen  Pág. 24
2.    Dadaísmo. Taschen. Pág. 16

Se autoproclamaron con títulos como Presidente del globo terráqueo, Presidente del Sol la Luna y la pequeña tierra.
A diferencia del grupo Dadaísta de Zurich, el grupo de Berlín tenía un agudo sentido de los negocios, grandes agencias organizaban sus giras. En 1920 los cinco principales protagonistas del movimiento fundaron una sociedad publicitaria, aunque nunca llegaron a hacerse cargo de ningún trabajo comercial.
No en vano  Tristán Tzara  dice “Dadá es un negocio que marcha bien”.
En Agosto de 1920 hacen “La primera feria internacional Dadá”, con más de 174 obras presentadas. Esta no tuvo mayor impacto, Hausmann reconoce varias décadas más tarde que el público no quería ver mas Dadá.  Poco tiempo después el Dadaísmo paso a ser considerado simplemente como otra corriente artística de principios de siglo. 
En Nueva York fueron los artistas europeos que llevaron  el impulso Dadaísta a la ciudad. Marcel Duchamp y Francis Picabia se conocieron ahí, y se unieron a Man Ray, originario de Filadelfia, también integraban este grupo Alfred Stieglitz y Walter Arensberg.
Para los Dadaístas neoyorquinos, el panfleto y la publicación en revistas también era su principal medio de comunicación. Pero a diferencia con las características del movimiento en Berlín, no estaba presente el accionismo anarcopolítico.
En esta ciudad, el Dadaísmo tuvo más presencia con los artistas plásticos, con Duchamp, Picabia y Man Ray a la cabeza. Ellos introdujeron el termino de antiarte o no arte. Un claro ejemplo fueron los  Ready mades, objetos específicos de consumo, que se ven elevados a la categoría de objeto de arte simplemente por la definición del artista.


Su legado

Los Dadaístas fueron grandes revalorizadores de materiales cotidianos para la creación artística.
Hugo Ball fue el inventor de los poemas fónicos, que con el tiempo se convirtieron en una de las tantas formas de expresión de los artistas Dadá. Esto lo hacían  con  la idea de devolverle a las palabras su pureza original.  Quiebran la relación entre el signo y el significado, reduciendo al lenguaje a simples silabas. Luego ordenándolo rítmicamente los sonidos de las mismas. 


Gadji beri bimba glandridi laula lonni cadori
gadjama gramma berida bimbala glandri galassassa laulitalomini
gadji beri bin blassa glassala laula lonni cadorsu sassala bim
gadjama tuffm i zimzalla binban gligla wowolimai bin beri ban
o katalominai rhinozerossola hopsamen laulitalomini hoooo
gadjama rhinozerossola hopsamen
bluku terullala blaulala loooo

zimzim urullala zimzim urullala zimzim zanzibar zimzalla zam
elifantolim brussala bulomen brussala bulomen tromtata
velo da bang band affalo purzamai affalo purzamai lengado tor
gadjama bimbalo glandridi glassala zingtata pimpalo ögrögöööö
viola laxato viola zimbrabim viola uli paluji malooo

tuffm im zimbrabim negramai bumbalo negramai bumbalo tuffm i zim
gadjama bimbala oo beri gadjama gaga di gadjama affalo pinx
gaga di bumbalo bumbalo gadjamen
gaga di bling blong
gaga blung.
                                                                                                Hugo Ball

Otra técnica muy utilizada era la de el poema creado al azar, a diferencia con el poema fónico, no se desarticulaban las palabras. Esta técnica, según sus creadores dejaba ver la esencia de la persona que lo realizaba.
Tristán Tzara incluso realiza un instructivo para realizar un poema de estas características. Que comprende el recortar palabras de algún artículo, meterlas en un recipiente e ir sacando una a una mientras se colocan en ese orden. Al final el producto obtenido es justamente, un poema dadaísta.
Otra de las formas de creación más utilizadas  de los dadaístas, fueron los cadáveres exquisitos, estas obras las realizaban  tanto en forma pictórica como escrita. Siendo los autores de  dichas obras  varios individuos, cada cual en su turno debía aportar una fracción, ya fuese un dibujo o una frase. Al finalizar el proceso se obtenía algo que era imposible de crear por  solo una persona, siendo por este motivo obras con un alto valor creativo.
Max Ernst aportó más que ningún otro artista a la técnica del collage, y experimentó con infinidad de técnicas pictóricas en las décadas posteriores a la creación del movimiento Dadá.
“¿Qué es el collage? Max Ernst lo describe de la siguiente manera: la técnica del collage es la exploración sistemática del contacto casual o artificialmente provocado de dos o más realidades ajenas entre sí sobre una superficie inadecuada a simple vista para tal cometido, y la chispa de la poesía que salta en el acercamiento de dichas realidades.” (3)
3.  Max Ernst. Apuntes biográficos. Dadaísmo. Taschen. Pág. 24
Man Ray fue pionero en nuevas técnicas de producción fotográfica, tanto en sus composiciones, con objetos de consumo cotidiano combinados con otros materiales.  Así como por sus investigaciones en el proceso fotográfico en sí. Experimentando con la técnica de la solarización, así como el valerse de fotografías sin la necesidad de una cámara. Utilizando papel fotográfico y colocando objetos delante, iluminándolos de la manera que le parecía conveniente.
Tanto las técnicas antes mencionadas, así como varias más, las han utilizado, modificado, y perfeccionado todas las generaciones posteriores al movimiento Dadá. Incluso fueron en las cuales se apoyaron nuevos movimientos como el Surrealismo.
En gran medida, el movimiento Dadá puso al alcance de cualquiera la posibilidad de generar obras de arte,  así como sacarle el gran peso de la historia a las mismas y a las técnicas tradicionales para generarlas.


Conclusión

El movimiento dadaísta, no surgió  de la investigación creativa, científica ni técnica. A diferencia de otras vanguardias o corrientes, surge de un sentimiento generalizado de insatisfacción e indignación sobre la nueva realidad que tanto el individuo como la sociedad estaban atravesando a principios del siglo XX.
La humanidad estaba dando un salto gigantesco a la modernidad mediante los nuevos sistemas de producción, pero esto así como traía grandes beneficios, trajo consigo un nuevo sistema, que sería el inicio de las más grandes acumulaciones de capital. La masa proletaria sería el motor de la gigantescas maquinarias que a partir de fines del siglo XIX comenzarían a hacerse cada vez más comunes.  Esto hizo necesario crear una manera de contener ese capital humano bajo control, para no entorpecer la producción. Aquí comenzaría a gestarse la lucha de la clase obrera frente a los intereses de la clase alta.
Tanto los artistas como cómo los intelectuales de la época, comenzaron a manifestarse en contra de este sistema, que se vio incrementado al final de la guerra, en medio de un proceso de reconstrucción generalizado tras los estragos del conflicto.
En esa situación de conflicto constante, los dadaístas deciden proclamarse en contra tanto de la guerra como de este nuevo sistema. Deforman y reinventan los métodos de expresión artística como protesta frente al poder político y la clase alta. Deciden que la sociedad no se merece un arte bello, y lo que buscan es escandalizarla, despertarla de su somnolencia para que reaccione frente a la desigualdad, actuar como espejo y mostrarle su propia incoherencia.
También se proclaman en contra de la concepción misma, tanto del artista como de la obra de arte. Rompen con todas las normas planteadas por la tradición artística.
El Dadaísmo es el responsable en gran parte del rumbo que toma el arte a partir de ese momento y en adelante. La obra de arte ya no está reservada para el museo o la galería. Se populariza tanto su creación como su destino de exhibición.
En la actualidad, se ha dado una situación similar con respecto a una nueva popularización del arte. Internet trajo consigo la posibilidad de conocer el trabajo de prácticamente cualquier persona en el mundo, conocer tanto a los artistas como a sus obras aunque nos separen miles de kilómetros de ellos. Esto va de la mano con la posibilidad de aprender de manera autodidacta una infinidad de prácticas.
Sumado a esto, el progreso industrial y la disminución en los precios de los productos, ha hecho que el porcentaje de personas con los medios para acceder a cámaras fotográficas, de video, computadoras y una innumerable cantidad  de artículos que nos permiten crear “arte”.
Todo esto ha generado una nueva concepción de que es una obra de arte, o que es un artista. Por supuesto, siguen estando las instituciones dedicadas a la formación de los mismos. Pero las prácticas artísticas ya no están limitadas a ellos, generando que hoy en día existan una infinidad de material de todas las naturalezas posibles asociadas de una u otra manera al ámbito artístico, que no nos alcanzaría la vida para conocer.
A mi modo de ver, hoy en día, más que nunca “Todo es Dadá” T. Tzara.













Bibliografía

-       “DADAÍSMO” Dietmar Elger. Taschen 2004

-       Herschel B. Chipp “TEORÍAS DEL ARTE CONTEMPORANEO”. Akal 1995